El Ángel Carro registró una buena entrada (3.702 espectadores) para presenciar el partido entre Club Deportivo Lugo y Deportivo Alavés correspondiente a la trigésima jornada de la Liga Adelante. La iniciativa promovida por el club lucense de regalar dos entradas a los aficionados que adquirieron sus localidades para el partido declarado como día del club ante el Barcelona B, ayudó a dar colorido a la grada sur del santuario rojiblanco.
El encuentro comenzó con dominio alterno, los de Quique Setién buscaron desplegar su juego de toque pero el Alavés no lo puso fácil. La presión del equipo visitante obligó a los rojiblancos a desplazar algún balón en largo, algo que no gustó demasiado en el banquillo local. Aún así, el peligro solo rondaba por el área de Goitia.
Superado el ecuador del primer tiempo llegaría el tanto inaugural. Toni colgaba un balón medido desde el lateral izquierdo del ataque lucense y en el corazón del área aparecía Pablo Caballero aprovechando su gran envergadura para poner por delante al Lugo en el electrónico. El Alavés tuvo la réplica pocos minutos después con un disparo de Laguardia sin dejarla caer a pocos metros de la meta de Dani Mallo, que se marchó ligeramente desviado.
Con el Lugo por delante en el marcador, el Alavés dio un paso al frente y se fue a buscar la igualada antes del descanso. Toti volvió a meter el susto en el cuerpo a los seguidores rojiblancos con un zapatazo desde la frontal que apunto estuvo de encontrar meta. Sin embargo los jugadores tomaron el camino de los vestuarios con el 1-0.
Nada más comenzar los segundos cuarenta y cinco minutos, la historia se repitió volviendo a aparecer el más alto de la clase para poner tierra de por medio en el marcador. En esta ocasión era David López quien centraba sobre el área de Goitia, donde aparecía Pablo Caballero de nuevo para poner la cabeza y hacer el segundo de los locales.
A pesar del jarro de agua fría el Alavés no bajaba los brazos y su actitud tenía recompensa. El colegiado señaló un penalti en el área del Lugo por empujón de Israel Puerto sobre Manu Barreiro. Sería el propio Barreiro el encargado de lanzar la pena máxima y acortar distancias para los vascos. Poco le duró la alegría a los de Alberto López, y es que cuando mejor se encontraban sobre el terreno de juego apareció la zurda de Toni Dovale para hacer el 3-1.
El partido prometía emociones y es que el delantero coruñés Manu Barreiro estaba empeñado en aguar la fiesta a sus vecinos de Lugo. Tras una providencial intervención de Dani Mallo a disparo de Sangalli, el balón se estrelló contra el larguero y el goleador del Alavés volvía a recortar distancias, haciendo creer a los suyos en la remontada.
Pero no hubo tiempo para más, el partido finalizó con el 3-2 en el electrónico y el Lugo que sigue en línea ascendente, poniéndose con 41 puntos en la tabla clasificatoria, lo que le permite seguir soñando con una plaza en los play off de ascenso.
Foto: Alberto López. (LVDG).