- El CD Lugo Sala se enfrenta al Burela (21 horas en el Municipal) en los cuartos de final de la Copa Galicia en un partido mezcla de nostalgia y de futuro, el que persigue esta entidad
- Fundado en 2014, el club, que mantiene un convenio con el CD Lugo, lidera su grupo de Tercera con varios ex del Prone como Miguel Muñoz, Iago Rodríguez, Antonio Diz o Diego Núñez
El deporte profesional es uno de los grandes motores de Lugo. Movilizador social. Promotor de hábitos saludables. El mejor embajador. Una vía por la que la ciudad ha conseguido medirse de igual a igual con otras mejores en mil circunstancias, pero no en una cancha o un campo.
Una de las grandes plataformas para estos desafíos fue el parqué del Municipal, teñido bien veces de azul con las siglas de la Liga Nacional de Fútbol Sala. En ese territorio, el Prone Lugo se hizo fuerte y consiguió una Recopa de Europa en noviembre de 2005. Poco antes, aquella escuadra puso contra las cuerdas al todopoderoso Boomerang Interviú en la final de la Copa del Rey.
El Azkar fue una fábrica de ídolos para los miles de niños lucenses que tocaron su primera pelota en una cancha de futsal, un deporte por el que han pasado la mayoría de los escolares de la ciudad. Vibrante y enérgico, en un 5 para 5 que hace saltar las chispas por su intensidad y que convierte el 40×20 que mide la pista en un cubículo, gracias a acciones que parecen efectos especiales.
Pero aquella historia se fue apagando hasta quedar reducida a cenizas. Cuando esto sucede en una urbe que ya de por sí administra dificultades, dar lumbre se convierte en una tarea quimérica. Sin embargo, cuando hay personas que en su sistema sanguíneo tienen un doble penalti o un portero-jugador, el cuerpo se levanta aunque para ello sea necesario invertir más horas y esfuerzos de lo racionalmente aceptado.
Lugo Sala, el resurgimiento desde la base
Sólo así puede entenderse la creación del Lugo Sala en 2014, una entidad deportiva que recogió el testamento del Prone con una filosofía muy clara y de la que siempre se sintió orgullosa el Municipal. «Trabajar con la base». Podría decirse que empezó de cero, pero sería negar la importancia de hombres como Marcos Pereira, presidente, o de compañeros como Manuel Martínez ‘Maradona’, Xabi López o Diego Ríos, el entrenador que dignificó el uso del traje y el talento incluso en los momentos más duros del Azkar y quien ejerce como el mejor prescriptor lucense de este deporte en el banquillo del Levante UD FS.
Junto a todos ellos, en aquella presentación que tuvo lugar el 14 de junio en el Concello de Lugo, un madrileño de carné, aunque gallego de obra: Miguel Muñoz, internacional con España, poseedor de una Recopa de Europa (06/07), una Copa de España (2006) y un sinfín de méritos reconocidos que no igualan su mayor virtud: el compromiso. La principal llave de los éxitos, muy pesada a veces, y que ha sabido cargar durante su larguísima carrera, en la que ha militado, por supuesto, en el Azkar Lugo, pero también en el Parrulo Ferrol, el Burela Pescados Rubén, el Lobelle Santiago, el Sala 10 Zaragoza… Y ahora, en el CD Lugo Sala, el equipo que ha recobrado el interés del fútbol sala en la localidad amurallada y que hoy disputa un partido simbólico.
Líder en dirección al ascenso
El club que lidera con mano de hierro (solo ha concedido un empate) el grupo gallego de la Tercera División recibe en cuartos de final de la Copa Galicia al Pescados Rubén Burela, hoy único representante gallego en la máxima categoría del fútbol sala. Especie única que es colista de una tabla que vive mínimos históricos de representación gallega.
Un partido con aire de nostalgia, porque es un derbi, aunque hayan cambiado los colores. Sin retransmisión, pero con el calor de los aficionados, ahora albivermellos por el acuerdo con el CD Lugo, que darán calor y colorido en las gradas del Municipal.
Será fácil recuperar la memoria, porque además de Miguel Muñoz (Madrid, 23/03/ 1981), en la convocatoria del equipo de la capital lucense figuran como los de Iago Rodríguez, Antonio Diz o Diego Núñez, que activan los recuerdos de un Azkar que luchaba en la élite con órganos de la casa.
Nombres y apellidos que se han reunido de nuevo para llevar al Lugo Sala a un lugar que por convicción merece. En la previa a este duelo nostálgico, y a la vez de absoluto futuro, LUGOSLAVIA charla con el ala y capitán del CD Lugo Sala, Miguel Muñoz, quien a sus 40 años lleva tatuado el brazalete de capitán sin miedo a afrontar la despedida, pero consciente de que esta debe ser por todo lo alto: con el ascenso que no pudo lograrse el curso pasado.
- Que el CD Lugo Sala exista es un hecho relevante, pero esta temporada puede marcar un punto de inflexión si se consuma el ascenso. ¿Sentís la responsabilidad?
- Creo que estamos disfrutando mucho del día a día. El nivel de los entrenamientos es muy alto y en la competición (Tercera División) se ve eso. Que estamos disfrutando. Más que responsabilidad, que demostramos tenerla, la razón de ser es que el equipo quiere llevar al club al lugar que se merece.
- Miembro de la junta directiva desde 2014 y ahora capitán del CD Lugo Sala. ¿Cómo se lleva este doble rol?
- Soy más jugador que directivo, pero sí intento estar pendiente de que no le falte nada a los jugadores. Cuidar los detalles, para que ellos valoren dónde están, intentar hacer todo desde la seriedad es fundamental. El camino recorrido hasta ahora ha sido espléndido, pero el objetivo aún no está conseguido. Viví en directo el ascenso frustrado en Coruña (el CD Lugo Sala perdió ante el IES Coruxo en Riazor en la final para subir a Segunda B) y lo sentí mucho por los jugadores, por Félix (Julio, entrenador hasta el año pasado) y su cuerpo técnico. Por Pereira (presidente) y por mucha gente que apoya al club y que se merecía el ascenso.
- Cuando uno habla con Miguel Muñoz es imposible no acordarse del Azkar Lugo, donde militaste varias temporadas. ¿Qué recuerdo tienes de aquella época en la élite del fútbol sala? ¿Puede soñar el aficionado con revivir aquellos tiempos de la mano del CD Lugo Sala?
- Los recuerdos son de felicidad. Aprendí mucho los años que estuve en Azkar, un club muy bien estructurado en su día, con una gran cantera. Soñar es gratis, ojalá se pueda conseguir. El fútbol sala en Lugo se vive y es un deporte que siempre ha tenido mucha afición. La ciudad se lo merece.
- Diego Núñez, Antonio Diz, Iago Rodríguez… Muchos jugadores con pasado en el Azkar y el LNFS que han bajado varias divisiones para formar una plantilla de ensueño en el CD Lugo Sala.
- Supone el descenso de categoría para todos ellos, pero la vuelta a casa. Jugué con los tres en diferentes etapas. Con Diego e Iago las últimas temporadas juntos (en Parrulo). Nos conocemos a la perfección y eso hace que a la hora de jugar nos conjuntemos a la perfección. Yo tenía claro que iba a jugar aquí. En su caso, ellos han querido estar, han hecho por venir, y todos queremos llevar al club lo más arriba posible.
- Dices que tú tenías claro que ibas a jugar en el CD Lugo Sala. ¿Por qué te enrolas en este proyecto desde la cancha?
- Quería estar. Tenía claro que me iba a retirar como jugador aquí, en un club y una ciudad con la que me siento muy identificado. La hoja de ruta está clara: seguir trabajando la cantera y cuidarla para que los chicos puedan ser parte de la primera plantilla. En lo que respecta al primer equipo debemos generar una identidad, que la gente se sienta orgullosa de su equipo, ser espejo para esa cantera y podamos crear ese sentimiento de pertenecer a Lugo Sala.
- Un objetivo claro que el CD Lugo Sala quiere conseguir con otro hombre de la casa al frente, Dani Díaz. ¿Cómo valoras su papel?
- Ser entrenador es muy complicado, siempre lo digo. Su trabajo ahí está, como he dicho anteriormente el día a día es inmejorable, y eso es gracias a lo que él plantea. No nos deja relajarnos, provocando que el nivel del equipo sea cada vez mayor.
- ¿Qué importancia tiene para el futsal lucense una figura como la de Diego Ríos, directivo del Lugo Sala y el mejor embajador que tiene la ciudad en la máxima categoría de este deporte?
- Diego Ríos siempre presume de ser de Lugo allá dónde va. Representa a la ciudad de una manera brillante y prueba de ello es su trayectoria. Me quedo con el Diego persona y amigo… Desde estas facetas es donde realmente ha influido en mi vida. Como entrenador ahí está su trabajo, no hace falta que yo diga nada al respecto, solamente sé que disfruté mucho jugando para él (en Parrulo) y conseguimos cosas impensables.
- En 2017, el CD Lugo firmó un convenio con el Lugo Sala para dotar de apoyo e integrar su nombre y colores en la entidad ¿Qué ha supuesto?
- La vinculación con el CD Lugo es positiva y nos da más visibilidad si cabe. A nivel estructural, si ambos clubes unen fuerzas será beneficioso para poder tener más medios. Hay otros clubes de fútbol sala que son una sección del equipo de fútbol y es todo un acierto. El CD Lugo se beneficiaría (ambas entidades conservan independencia) de tener una sección de un deporte que se vive mucho en la ciudad, además de poder ayudar a crecer a muchos niños y niñas a través de este deporte.
- ¿Qué supone para vosotros el partido de cuartos de final en la Copa Galicia ante el Pescados Rubén Burela? ¿Podríais dar la machada?
- No supone nada más que es un día para disfrutar con toda nuestra gente, para valorar lo hecho hasta el momento y confiar en nosotros mismos. Para que esa posibilidad exista tenemos que hacer un partido perfecto y que salgan las cosas a pedir de boca. Lo vamos a intentar. Nuestro objetivo es la liga, pero ganar sería una alegría inmensa por muchísima gente. Se lo merecen muchas personas, confiamos en nuestras posibilidades y vamos a competir.
- Aunque nacido en Madrid, gran parte de tu carrera ha transcurrido en Galicia. Jugaste en el Fórum Ourense, Lobelle Santiago, Pescados Rubén Burela, Azkar Lugo, O Parrulo Ferrol… ¿Qué representa para ti esta tierra? ¿Recuperará el protagonismo perdido en la élite del futsal?
- Galicia me lo ha dado todo. Aquí he crecido cómo persona y jugador. Mis hijos son gallegos. Con eso está todo dicho. Galicia ha sido cuna de fútbol sala siempre, llegando a tener hasta cuatro equipos en la máxima categoría durante varias temporadas. Ahora, como pasa en el deporte normalmente, vienen tiempos no tan buenos, pero estoy convencido de que vendrán.
- ¿Qué es lo que más le ilusiona a Miguel Muñoz a estas alturas? ¿Cómo le gustaría retirarse?
- Me ilusiono con seguir dando lo mejor de mí a un deporte que me apasiona, que me lo ha dado y sigue dándomelo todo. No sé cuánto tiempo me queda de jugador. Solamente saboreo cada día, cada entrenamiento, e intento estar siempre en las mejores condiciones para ello. Lo que me gustaría conseguir es ganar el próximo partido, el de hoy, y así sucesivamente hasta lograr el objetivo que nos marcamos al inicio de la temporada. Sería muy feliz. Me siento orgulloso de ser la persona que soy hoy, más allá del jugador, contento por la trayectoria que he llevado hasta ahora en lo deportivo. Aunque esto sigue, no acaba aquí, así que mantendré la misma mentalidad de siempre, de no conformarme y querer siempre dar lo mejor de mí.
Fotos cortesía de CD Lugo Sala.