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Jaume Cuéllar CD Lugo: gasolina y descaro para las bandas albivermellas

por Denís Iglesias 30 agosto, 2021
Jaume Cuéllar y Ángel Cuéllar CD Lugo - Pablo del Valle.
Tiempo de lectura: 8 minutos

El mercado de fichajes del CD Lugo ha sido escalonado, con un ritmo de llegadas más o menos gradual que se ralentizó al final del mismo, donde las apreturas son visibles, y más en un club como el albivermello, lastrado por las malas gestiones de temporadas anteriores. El conjunto de fichajes del Club Deportivo Lugo ha sido variado, con perfiles de futbolistas sin equipo, otros con experiencia en la categoría y algunos sin ningún tipo de referencia en Segunda División, como ha sucedido como Jaume Cuéllar (Granollers, 23/08/2001), un joven atacante que ha podido debutar con la Selección de Bolivia absoluta, el país de sus padres.

La noticia de la llegada de Juame Cuéllar al CD Lugo fue adelantada por Emilio González el 4 de agosto, en la previa al partido de pretemporada que los albivermellos disputaron contra el Coruxo en Foz. Un duelo que acabó convirtiéndose en el gran varapalo de la preparación tras el 0-3 infligido por el equipo de 2 RFEF al cuadro lucense, derrota que pudo presenciar desde la grada del Martínez Otero el propio Juame Cuéllar junto a Josep Señé, otra de las incorporaciones estivales del equipo de Rubén Albés

Precisamente, el técnico vigués era cuestionado sobre la incorporación del jugador boliviano, aunque nacido en Granollers, en la rueda de prensa posterior al 0-3 contra el Coruxo, pero prefirió no opinar. El fichaje de Cuéllar apareció en el horizonte como una oportunidad de mercado reconocida por Mauro Pérez, una oportunidad para hacerse con un jugador en propiedad con proyección. Desde un principio se le ha puesto la etiqueta de «fichaje promesa», liberando al futbolista de 20 años de la carga que supone ser titular en un equipo donde la presión forma parte del día a día. Pero su debut ante la Real Sociedad B y las necesidades ofensivas acuciantes del equipo lucense provocarán un cambio de su condición antes de lo previsto.

Jaume Cuéllar y su contrato de 2+2

Jaume Cuéllar fichó por el CD Lugo firmando un contrato por dos temporadas más otras dos opcionales, en una de esas fórmulas contractuales que solo entienden los que las diseñan. Siempre merece la pena leer las notas de prensa de los clubes cuando presentan a sus incorporaciones, porque a pesar de ser escuetas, dan pistas sobre los argumentos de los fichajes. En el caso de Cuéllar, se destacó su versatilidad para jugar «en diferentes posiciones del frente de ataque, principalmente como extremo o delantero».


En la hoja de vida del futbolista boliviano, el equipo lucense ponía el acento en su «enorme proyección, siendo internacional absoluto con la Selección de Bolivia y habiendo sido formado en la cantera del FC Barcelona». Cuéllar pudo debutar con La Verde en la pasada Copa América, donde el combinado que dirige César Farías se vio afectado por el Covid-19 -que después acabó padeciendo él-, de ahí la oportunidad que se le brindó al ahora jugador del Club Deportivo Lugo frente a Paraguay en la primera jornada del torneo. Sin embargo, el partido salió cruz para Cuéllar, que acabó expulsado en la segunda mitad después de recibir una segunda amarilla. Dos entradas en el centro del campo el enviaron a la caseta antes de tiempo en un partido que su selección acabó perdiendo 3-1.

«Cuéllar es un jugador bastante técnico y explosivo, que forma parte de la escuela española, puesto que se formó en La Masia del FC Barcelona. Tuvo bastante continuidad en los últimos meses en el Torneo de Primera en Italia, aunque no alternó con el primer equipo del SPAL, desde el que llega a Lugo. Jugó un partido en la Copa América y lo estaba haciendo regular, hasta que un calentón le conllevó la roja, pero fue por la inexperiencia. Seguramente su rol en el CD Lugo será actuar como revulsivo, ya que es algo que lo caracteriza: cambiar partidos», comentan a Lugoslavia desde Fútbol Bolivia, cuenta especializada en el seguimiento de los jugadores de este país. 

Jaume Cuéllar, parte de la generación Ansu Fati

La Masia del FC Barcelona. Esa es la otra gran referencia, además de su carrera fulgurante por las diferentes categorías de la selección nacional. Aunque realmente ambas líneas argumentales están ligadas en su carrera, porque el hecho de militar en la cantera blaugrana le permitió gozar de oportunidades en las citas internacionales y eso a su vez le concedió mayor crédito entre sus entrenadores. Cuando todavía era jugador del Cadete A, recibió la convocatoria para jugar el Sudamericano sub-2017 y fue tal el interés que generó que el por aquel entonces seleccionador de Bolivia, Mauricio Soria, lo citó para una sesión con el combinado absoluto. 

Por aquel entonces, la definición que se atribuía a Cuéllar incluía descripciones como «jugador con notable calidad técnica y buen físico» o «delantero potente que puede jugar en las tres posiciones de ataque». Estas virtudes, junto a su capacidad para estar una etapa por delante de sus compañeros, hicieron que el FC Barcelona le echase el lazo cuando militaba en el Racing Blanenc, que militaba en Segunda División infantil, pero con el que anotó casi 100 goles que se convirtieron en su mejor certificado de futuro. Previamente, Cuéllar se había formado en las categorías inferiores del CF Poniente.

Jaume Cuéllar CD Lugo con el Racing Blanenc

Jaume Cuéllar CD Lugo con el Racing Blanenc

Pero tal y como contaba Ferrán Martínez en un artículo en Mundo Deportivo, «sus inicios en Can Barça no fueron fáciles a pesar de su talento y su olfato goleador, por lo que tuvo que implicarse tácticamente, donde ha mejorado considerablemente desde su llegada, aunque debe ir asimilando conceptos». Aquel Cadete A estaba entrenado por Franc Artiga, uno de los entrenadores más prolíficos que ha tenido la base del club culé y que ha formado a jugadores como Carles Aleñá, Dani Olmo o Marc Cucurella. En aquella plantilla formativa, Jaume Cuéllar compartía vestuario con Eric García, Nico González, Konrad de la Fuente o Ansu Fati, que aparecen junto a él en las fotos de familia de la cantera blaugrana. Son siempre un ejercicio de recuerdos y promesas al conocer los dispares destinos que ha vivido cada jugador. 

El cambio de rumbo de Cuéllar se produce rápido, porque nada más terminar esa temporada, en el verano de 2017 se incorpora a las filas del SPAL italiano, equipo histórico cuyas siglas significan la poética Sociedad Polideportiva Arte y Trabajo. Cuando llega el jugador del CD Lugo, este club acababa de ascender a la Serie A, la máxima categoría del fútbol de Italia, en la que no militaba desde hace medio siglo, y en ella se mantuvo hasta 2020. En el conjunto blanquiazul, Cuéllar militó en las categorías inferiores, pero pudo debutar con el primer equipo, convirtiéndose en el primer jugador boliviano en jugar en la división principal del calcio. Fue en diciembre de 2019, con 18 años, y contra el Lecce en la cuarta ronda de la Coppa Italia. El atacante sustituyó a Sergio Floccari, capitán del SPAL, casi al término del encuentro, con el número 94 en la espalda, siguiendo la algebraica tradición de darle dorsales que rozan la centena a los jugadores de las categorías inferiores. 

Leonardo Semplici fue el encargado de darle la oportunidad, el artífice de llevar al SPAL de la Lega Pro (Serie C, tercer nivel) a la Serie A en apenas unas temporadas. Cuéllar pudo disfrutar de otras dos oportunidades, ya con su equipo desahuciado a Serie B, frente a la Roma y la Fiorentina, durante la temporada 2019/2020, en la que además fue convocado en otras cinco ocasiones. Aunque su desempeño general fue en el llamado Torneo Primavera, una competición en la que participan los 42 equipos de las dos primeras categorías del fútbol italiano y que está reservado para jugadores de hasta 20 años, edad que acaba de cumplir el jugador del CD Lugo. De ahí que este verano haya decidido buscar un nuevo destino ante la imposibilidad de asentarse en el primer equipo del SPAL, ahora en Serie B.

Crecimiento acelerado en un club necesitado

Surgió entonces la opción de recalar en la ciudad amurallada recuperando por un momento la extinta etiqueta de equipo trampolín que se ha ido disolviendo con el paso de los años, en los que una pobre gestión institucional ha entorpecido el camino del progreso para el club albivermello. Sin embargo, la llegada de Cuéllar vuelve a traer el sentido que tantos futbolistas aprovecharon en temporadas pasadas, que usaron el CD Lugo como catalizador de sus carreras. El avanzado boliviano firmaba a principios de agosto el citado contrato 2+2 y era presentado por Mauro Pérez como un jugador «con un gran potencial que creíamos que no podríamos incorporar, por su trayectoria, por lo que no dudamos un segundo cuando se abrió la posibilidad».

La virtud más importante de Cuéllar es su capacidad para girarse, encarar y jugar entre líneas, su verdadero valor diferencial

Durante su presentación, el director deportivo albivermello describió a Cuéllar como un futbolista capaz de jugar como extremo por ambas bandas e incluso como mediapunta, «pero su virtud más importante es la capacidad que tiene para recibir entre líneas, girarse y encarar, habilidad que lo hace diferente». Mauro Pérez también quiso marcar las etapas y el estatus del que parte el jugador del CD Lugo, considerado como «un activo para el club en un futuro con el que no debemos tener prisa».

Una afirmación lógica en cualquier entidad con un mínimo de estabilidad, pero que en la vida deportiva de los albivermellos deja de tener sentido cuando cada trimestre es una reválida en sí misma. De hecho, a tenor de lo visto en el arranque de Liga, Cuéllar tiene papeletas para disfrutar de minutos y aportar al equipo esa chispa que trae su etiqueta y que por ahora no están sabiendo encender sus compañeros, a excepción de Gerard Valentín, un perfil único que siempre apuesta por el autoconsumo. 

«Jaume Cuéllar es un extremo para jugar abierto y encarar, con capacidad para salir hacia ambos perfiles, aunque con cierta tendencia a salir sobre su pierna derecha, que es la más dominante. Sus mejores acciones desde 1 contra 1 y el regate, por lo que hay que entender los riesgos que conlleva tener a un jugador capaz de encarar entre 10 y 12 veces por partido», según recoge Coach Office, cuenta especializada en el seguimiento y análisis de futbolistas latinoamericanos, que refuerza la carta de aptitudes que todos los implicados en su fichaje han elaborado. El avanzado del equipo lucense fue escueto en las respuestas durante su presentación, en la que se refirió a un aspecto fundamental como es «el entorno familiar propicio para crecer», patrimonio indestructible de este club que abanderan jugadores como Carlos Pita, Fernando Seoane e Iriome, sin los que esta entidad hace tiempo que no tendría sentido.

«Es indiferente donde me pongan, porque siempre intento dar lo mejor de mí», defendió Cuéllar en su puesta de largo como jugador del CD Lugo que demandará su participación en un año de exigencias renovadas donde cada uno de los peones disponibles tendrá oportunidades para reivindicar su espacio en este equipo, del que además forma parte como jugador en propiedad, por lo que su participación debería tener prevalencia en muchos de los contextos que se presentarán en el curso más duro a la vista, como cada nuevo que llega. Y con el deber onomástico de llevar el apellido «Cuéllar» en una camiseta albivermella, una combinación que devolvió la ilusión al Anxo Carro por medio de un Ángel goleador, bálsamo del CD Lugo en Tercera, y que protagoniza la ilustrión de cabecera, obra de Pablo del Valle. 

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