Yo estuve allí cuando la rivalidad entre el CD Lugo y el Real Oviedo nació. Si me preguntasen, yo diría que estuve en el momento y en el lugar en el que un humilde equipo acostumbrado a vagar entre la Segunda B y la Tercera y un equipo histórico de Primera, con hasta una presencia europea, pusieron la primera piedra de un pique que dura hasta hoy. Fue el 4 de febrero de 2012, cuando el Lugo de Setién soñaba con un ascenso que al final se convertiría en realidad y el Oviedo penaba en la B, de donde aún tardaría unos años en salir. El partido acabó 2-2 y de los 4800 espectadores que entonces tenía de aforo el Anxo Carro (no había supletoria), 2000 eran azules. Hasta una valla se rompió en la celebración de uno de los goles ovetenses.
La ilustración que encabeza este artículo es de Pablo del Valle (@pablo_dvp), autor de #NaftiBarberShop. Sólo permitida su reproducción bajo cita del autor y del medio (@LGV11010).
Aquel fue un partido muy tenso. Ambos estaban arriba en la tabla y la directiva de Bouso tuvo la nefasta idea de repartir aficionados del Oviedo por todo el graderío, creando situaciones de no poco voltaje entre ambas aficiones. A partir de entonces, que si el Anxo Carro es un futbolín, que si aldea, que si problemas con las entradas que se mandaban a la capital asturiana… Muchos pequeños pellizcos que han ido conformando una rivalidad que ya nadie niega y que el ascenso del Sporting con gol de Caballero mediante terminó de fraguar. Muy al contrario de lo que piensan muchos, los equipos pequeños también molestan a veces a los grandes, y eso está bien. No solo con el Oviedo, pero también con el Oviedo. Y bien bonitos que son esos piques.
El fútbol de la nueva no-normalidad pone sordina a todo esto. Este sucedáneo que nos tragamos a cucharadas a falta de otra cosa que llevarse a la boca, de gradas vacías y poco espíritu, no deja espacio para que las aficiones se calienten más allá de la virtualidad de las redes sociales. No habrá cánticos en el Anxo Carro, ni desplazamiento masivo de la marea azul que los de aquí mirábamos con una mezcla entre fastidio y envidia, pero sí habrá dos equipos que se juegan tres puntos que les pueden poner mirando para arriba. Nafti no quiere ni oír hablar de ello, y Ziganda también se disfraza de prudente, pero ¿a quién le amarga un dulce?
A Nafti se le han presentado por fin Djaló y El Hacen tras su periplo por la geografía africana. Los niños perdidos y hallados en el templo (Evangelio de Lucas, 2: 41-50) llegaron con el tiempo justo para preparar el partido, pero al menos llegaron y Djaló incluso apunta a la titularidad. También Campabadal, incombustible e insustituible, si al final le levantan la inexplicable sanción después de poder jugar con la cautelar en Alcorcón. No se cerró Nafti a hacer rotaciones, aunque las bajas y los retrasos acotan bastante la elección. El que sí parece que tendrá minutos será Gerard Valentín (O Messi dos Probes, Samuelson dixit). A su regreso se encomienda el lucensismo para recuperar las sensaciones perdidas en Santo Domingo.
Enfrente estará el Oviedo, que suma cuatro jornadas sin perder, diez puntos de doce posibles y la sensación de que han encontrado el rumbo. Nahuel, Borja y la manija de Tejera marcan el ritmo de los carbayones, que han sacado la cabeza de abajo y vienen a Lugo mirando a los playoffs. Contarán, eso sí, con la baja de Blanco Leschuk, que a falta de caudal goleador aporta presencia y brújula desde la punta del ataque azul. En su lugar estará Obeng, un chaval al que conviene seguirle la pista. Habrá partido grande, habrá partido de fútbol.
Alineaciones posibles del CD Lugo – Real Oviedo
Árbitro: Eduardo Prieto Iglesias
El árbitro del CD Lugo – Real Oviedo será el navarro Eduardo Prieto Iglesias, que estará asistido por el madrileño David Gálvez Rascón en el VAR. Prieto Iglesias fue el único colegiado que descendió de Primera a Segunda División. Estuvo en la máxima categoría durante cinco temporadas en dos etapas (2013-2016 y 2018-2020).
En la categoría de planta ya había dirigido encuentros otro cinco años (2010-2013 y 2016-2018). En la temporada 2019/2020, Prieto Iglesias arbitró 18 encuentros en los que mostró 97 tarjetas amarillas (casi 5,4 cartulinas por encuentro) y 7 rojas.
En directo por Radio Lugoslavia
Como cada jornada, podrás seguir el CD Lugo – Real Oviedo por Radio Lugoslavia. Segunda semana con cronómetro, marcador y otras novedades que hemos introducido. Rubén F. Dorado seguirá poniendo al desempeño del club albivermello. Con los comentarios de Denís Iglesias, Jesús Blanco y un nuevo ‘fichaje’: Arsenio Coto. El periodista de El Progreso se estrena en la cada vez más amplia selección de voces de este proyecto 100% albivermello. Si quieres que siga adelante, apóyalo y colabora.
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