Crónica

Cónica del CD Tenerife 0-0 CD Lugo. ¿susto o muerte?

por Javier Folgueira Lozano 14 octubre, 2018
Tiempo de lectura: 5 minutos

Más o menos todos hemos oído un chiste en el que le dan a elegir a alguien entre susto o muerte, y cuando el consultado elige susto y protesta, el que le preguntaba le dice: ah, pues haber elegido muerte. Es un chiste horrible en mi opinión y que así explicado resulta aún peor, pero muy ilustrativo de la situación de CD Tenerife y CD Lugo y de su partido hoy en el Heliodoro Rodríguez López, en el que el empate a 0 ha sido para ambos conjuntos el menor de dos males.

La semana había sido “complicadilla” en Lugo, con comparecencia en la RG de Viqueira tras la derrota en Elche y dudas hacia el equipo y hacia Javi López. El director deportivo del Lugo pedía paciencia y confianza en el trabajo del equipo, y de paso algo de contención y paciencia a los aficionados que frecuentamos las redes sociales, que somos bastantes menos que los 3.000 que bajan al campo, pero parece que hacemos más ruido, porque que yo recuerde en el campo no ha habido aún protestas hacia el equipo como para pedir un apoyo que hasta ahora no ha faltado.

El caso es que tras esa semana complicadilla el ambiente en el chat prepartido de Lugoslavia no era el mejor, pero aún podía empeorar. Una hora antes del encuentro, salía la alineación y los presagios entre nosotros eran de 4-4-2 y juego al balonazo en largo. Seoane y Pita tendrían que ejercitar el cuello, porque con el 11 que se presentaban los lucenses y el 5-4-1 que viene jugando Oltra desde su llegada a las islas (aunque haya quien se empeñe en disfrazarlo de 4-3-3 porque uno de los centrales es Alberto) todo parecía indicar que el balón sólo lo iban a ver pasando por encima de sus cabezas. Incluso hubo quien se aventuró a pronosticar un 0-0 en base al “espíritu aventurero” de ambos entrenadores y los onces respectivos. Pero qué sabremos nosotros, que somos unos pobres ignorantes que no confiamos en nuestro equipo.

El caso es que arrancó el partido y, por desgracia, los presagios parecían cumplirse. El Tenerife se hacía con el balón y con el dominio del encuentro, aunque con mucho miedo y sin crear peligro. Total de tiros a puerta: 1, de Montañés en el 22′. El juego, horrible por ambas partes, con mucho miedo a la derrota.

La propuesta de ambos técnicos era ¿susto o miedo? ¿prefieres que juguemos feo y mal o que perdamos el partido? Pues seamos claros, si alguien nos hiciese esa pregunta en la vida real, lo mínimo que haríamos sería mandarlo a paseo. Parece que de repente es imposible jugar bien y ganar. Hay que elegir entre mantener la puerta a 0 o jugar al fútbol, porque las dos cosas no pueden ser, así que los directores de ambos conjuntos eligieron susto, aunque el partido en lugar de miedo lo que provocaba era auténtica sensación de tedio.

Lo curioso es que tan irrealizable eso de jugar bien y no perder no debe ser, porque a pesar de que la portería seguía a 0, Javi López vio algo sobre el campo que no acababa de convencerle, hasta el punto de cambiar el esquema en el 34′ retirando a un delantero (Herrera) por un centrocampista (Sergio Gil). Buena decisión en mi opinión, porque: 1) nos permitiría recuperar el control del balón igualando el número de jugadores en el mediocampo y 2) me daba la ocasión de ver a Gil en la posición en la que más me gusta, por delante de los dos pivotes. Sin embargo, un cambio tan prematuro provoca muchas dudas, ya que el esquema del Tenerife era el mismo de las últimas jornadas, aunque con jugadores de corte más defensivo. ¿no se sabía antes del partido? ¿era necesario agotar un cambio tan pronto? ¿por qué Herrera y no Dongou? ¿el jugador no respondía a las indicaciones del míster o cree este que el rendimiento de Dongou es superior al del canario? Demasiadas preguntas sin respuesta que esperamos que algún día los expertos en fútbol nos aclaren a los pobres ignorantes que sólo lo seguimos desde hace décadas sin entender (según algunos profesionales) nada de lo que vemos.

Pese a lo estrafalario del cambio temprano, sin duda el resultado fue el deseado, ya que como decía antes, el Lugo recuperó el control del encuentro, si bien había quien en las odiadas redes sociales opinaba que no gracias al cambio, aunque desconocemos su teoría alternativa. Más dudas para los pobres ignorantes.

El inicio del 2º tiempo fue más esperanzador. El CD Lugo volvía a ser el de años anteriores, casualmente usando el esquema del año anterior y 8 jugadores que ya estaban el año anterior.  Primera ley de Murphy de la ingeniería: si funciona, no lo toques. Con un esquema reconocible y jugadores acostumbrados a él sobre el campo, el balón volvía a circular y Pita, Gil y Seoane volvían a encontrarse y a llevar la manija del centro del campo. El resultado: por fin el Lugo se acercaba a la puerta rival, con dos disparos a portería. Al igual que en Elche, hubo que esperar casi 1 hora para ello, pero bienvenidos eran. Ahora era a Oltra al que le entraba el miedo en el cuerpo y le tocaba reaccionar, dando entrada a Joao con el fin de dotar de velocidad al Tenerife y tratar de pescar al Lugo a la contra, siguiendo al pie de la letra el manual del entrenador que tiene más miedo a perder que a no ganar. Además, evitaba la superioridad numérica del Lugo en las bandas, aunque Luis Ruiz y Campabadal no hubieran pasado de centro del campo prácticamente en todo el partido. ¿órdenes del entrenador? Más dudas.

Tras ese cambio de dibujo del Tenerife se acabó el partido. El “Tete” le cedía el balón al Lugo con la condición de mantenerlo lejos del área, y el Lugo aceptaba la apuesta al 0-0 de buena gana y daba dos pasos atrás. En el último cuarto de hora del partido, el hombre más adelantado de los lucenses estaba 11 metros por detrás de la línea del medio campo. Aún así, el único despiste de la zaga del Tenerife a punto estuvo de aprovecharlo en el 83′ un Lazo al que le pasó factura la fatiga y jugar a pierna cambiada. En el banquillo, se preparaba Escriche para entrar, pero a última hora lo reemplazaba Campillo. Un cambio más conservador y por lo tanto más acorde con el tono del partido.

Le doy la razón a Pedro Pablo Alonso hoy en Ao Contraataque: los que vimos el partido entero de Tenerife, merecemos un premio

Finalmente, resultado feliz para ambos entrenadores. Ambos salieron a jugar a nada y la nada fue lo que obtuvieron. Particularmente, me divirtió mucho más el partido del Elche, que jugó mucho más valiente ante el Dépor y, por fortuna para los defensores del resultadismo, se llevó 4 goles para Alicante en la mochila, con la cabeza bien alta.

En fin, a los que bajamos al Anxo Carro a divertirnos se nos seguirá acusando de no amar al club, porque si amas al club no basta con pagar tu abono religiosamente, tienes que estar encantado por pasar 90′ soportando un juego tedioso e insulso. En esto, le doy la razón a Pedro Pablo Alonso hoy en Ao Contraataque: los que vimos el partido entero de Tenerife, merecemos un premio.

Por suerte, tengo mi abono al Ensino y las chicas tienen la buena costumbre de no aburrir al público ni acusarlo de abandonar al equipo por querer pasar un buen rato a cambio de su dinero. Que a veces algunos olvidan que son los espectadores los que pagan y tienen derecho a exigir un producto entretenido y no el club el que exige a los espectadores cómo deben apoyar al equipo. No olvidemos que en el mundo capitalista en el que vivimos si el cliente no está contento, siempre tiene otras opciones de ocio más divertidas en las que invertir su tiempo y su dinero.

Comparte:

Deja un comentario