Crónica

En Pamplona también hubo silbidos

por Javier Folgueira Lozano 28 abril, 2018
Tiempo de lectura: 9 minutos

Revolución en la alineación del Lugo tras una semana en la que ha habido cruce de declaraciones entre aficionados y personas del club a raíz de los silbidos del partido ante el Lorca, que ha dado lugar a un partido en El Sadar en el que, a pesar de repetirse el marcador de la semana anterior, las sensaciones para los seguidores albivermellos han sido muy diferentes a las vividas en el Anxo Carro.

No ha faltado, como digo, cierta polémica en redes entre las declaraciones de aficionados criticando a parte de la afición por los silbidos, las de otros aficionados criticando al equipo por su desidia en las últimas jornadas e incluso el propio Francisco afirmando que la afición había “dado la espalda” al equipo.

El caso es que puede que la afición lucense no sea la más espectacular de la categoría y que no sea un buen hábito pitar al equipo (particularmente, no creo que hacerlo aporte nada positivo, aunque también cabe preguntarse si sin esa pitada habría habido un cambio tan radical en la alineación como el de hoy), pero tampoco me parece justo valorar a los aficionados que bajan al Anxo Carro haga sol o nieve (seremos pocos, pero muy fieles) por una pitada puntual y bastante justificada. La prueba la hemos vivido hoy en El Sadar, y es que si preguntamos por ahí cuales son las mejores aficiones de segunda, saldrán muchos nombres a relucir, pero una que casi seguro figurará en todas las listas será la rojilla de Osasuna, lo que sin embargo no ha impedido que la pitada de hoy a su propio equipo fuera de bastantes más decibelios que la de la lucense la pasada semana, incluso con gritos de “Diego (Martínez) vete ya”. ¿significa esto que la afición de Osasuna ya no es buena? No, significa que no comparten lo que están viendo sobre el terreno de juego y es su forma de expresarlo, igual que ocurriera con el Lugo frente al Lorca.

Francisco revolucionó en el 11 inicial, cambiando hasta 6 jugadores respecto a la semana anterior

El caso es que como decía en la introducción, a pesar de que el marcador fuese el mismo, casi con toda seguridad una actitud ante el Lorca igual que la demostrada hoy ante Osasuna seguramente habría ahorrado polémica y silbidos, pero claro, el equipo de hoy distaba mucho de ser el mismo en actitud… y en componentes, porque decidió Francisco ejecutar una pequeña revolución en el 11 inicial, cambiando hasta 6 jugadores respecto a la semana anterior. Solo Juan Carlos, Pita, Azeez, Kravets y José Carlos repetían titularidad. Escriche se ganó con su gol en la jornada anterior la titularidad y el cambio de Lemos por Leuko era obligado por sanción, pero el resto de cambios nos cogieron por sorpresa a la mayoría. Josete acompañaba a José Carlos en el centro de la defensa, y la verdadera revolución llegaba en la medular, con Seoane y Sergio Gil acompañando a Romero, lo que dejaba sobre el césped a hasta 4 jugadores con corte similar. ¿un equipo con 4 pivotes? Parecía un experimento llamado al fracaso, pero ante el que curiosamente la mayoría de comentarios eran positivos, y es que este equipo necesitaba un cambio urgente.

Pita y Seoane se quedaban atrás como auténticos pivotes y el resto de medios (y Escriche) se lanzaban hacia el área rival con un hambre de gol que hacía muchas jornadas que no veíamos.

La revolución de Francisco hizo efecto nada más iniciarse el juego, y es que el cambio se veía no solo en los nombres, si no también en la actitud. Pita y Seoane se quedaban atrás como auténticos pivotes y el resto de medios (y Escriche) se lanzaban hacia el área rival con un hambre de gol que hacía muchas jornadas que no veíamos.

La jugada de los 4 medios manejadores de balón parecía salirle bien a Francisco, con Seoane y Pita secando a Borja Lasso, el principal peligro osasunista, y sacando el balón bien jugado a pesar de la presión alta de los pamplonicas, una presión que los lucenses rompían relativamente fácil y cada vez que lo hacían enfilaban la portería rival de forma directa, con Azeez y Sergio organizando el juego de ataque y alternando la posición de interior con la de mediapunta, un Romero muy vertical, los laterales muy proyectados en ataque (Kravets principalmente en la 1ª mitad y Lemos en la 2ª) y un Escriche que daba una sensación de peligro constante e incluso anotó su segundo gol en dos partidos, aunque anulado por un fuera de juego de Jaime Romero en el inicio del a jugada.

El partido no era bonito de ver, algo inevitable teniendo a un equipo de Diego Martínez en frente, pero sin duda los lucenses le ponían ganas y verticalidad, las dos cosas que más se echaban en falta en los nuestros en las últimas jornadas.

Así transcurrió el primer tiempo, con buenas ocasiones para ambos bandos pero sin puntería y con un Lugo al nivel de Osasuna o incluso algo superior, lo que dio lugar a los primeros silbidos contra los locales. Sin embargo, al igual que le ocurriera al Lugo frente al Lorca, esos silbidos hicieron que en la segunda parte los rojillos salieran más motivados y se hicieran con el control del balón y el juego, superando por momentos a los lucenses por completo, y la consecuencia lógica no tardó en llegar: un error de marcaje a la salida de un córner y hasta en dos ocasiones remató Unai García contra Juan Carlos para anotar el 1-0, que tal vez no hacía justicia al conjunto del partido pero sí a lo visto en la segunda mitad.

Los de Francisco hoy sí dieron muestras de ser ese equipo competitivo de final de la primera vuelta

Tras el gol, pareció notarse un cierto bajón físico en los albivermellos. Es lógico que Azeez, que ha derrochado esfuerzo desde la jornada 1, y Seoane, que ha disputado a tope casi todos los minutos de la temporada, no sean capaces de mantener el nivel de esfuerzo los 90 minutos (a fin de cuentas, son humanos), así que se hizo necesario reemplazar al nigeriano, el más exigido hoy físicamente de los dos, y a Romero por Vico y Campillo. La entrada de los dos teóricos titulares no tuvo un efecto inmediato y el dominio osasunista se mantuvo durante unos minutos, pero era cuestión de tiempo que Osasuna hiciese lo mismo que en el resto de partidos esta temporada cada vez que se pone por delante en el marcador: dar un paso atrás y contemporizar, tratando de dormir el partido.

Sin embargo, los de Francisco hoy sí dieron muestras de ser ese equipo competitivo de final de la 1ª vuelta y siguieron presionando (espectacular Sergio Gil en el medio campo), hasta lograr el empate, que llegó en una jugada en la que Campillo queda en el suelo por una clara falta, pero Sergio decidió que el día no estaba para quejas, si no para “tirar p’adelante” y dio un balón en profundidad a Kravets que, en una de las suyas, puso un gran centro para que Lemos bajase el balón con una calidad espectacular y estrellase un magnífico disparo al poste, Seoane recogiera el rechace y disparara para que el balón rebotase en Vico y cayera ante un Herrera muy atento que la remató al fondo de las mallas. Un gol muy merecido y que da fe de las ganas que pusieron hoy los nuestros, en una jugada en la que hasta 5 albivermellos intervinieron decisivamente (6 si contamos el rechace en Vico) y en la que ambos laterales se encontraban en posiciones ofensivas a la vez.

Por fin llegan los 50 puntos para los de Francisco y que nadie los use como excusa para adelantar las vacaciones

No fue esto todo, y es que poco después otro centro medido de Kravets (¿alguien sabe si este chico está ya renovado y con una cláusula bien alta?) dejó solo ante Sergio Herrera a Fede Vico, que enganchó un volea complicada de rematar, pero la envió demasiado centrada. Pudo venirse el Lugo con los 3 puntos de El Sadar y esos gritos de “Diego vete ya” demuestran que no habría sido en absoluto injusto.

En definitiva, por fin llegan los 50 puntos para los de Francisco y que nadie (aficionados incluidos) los use como excusa para adelantar las vacaciones, porque no nos engañemos, con 49 estábamos igual de salvados, pero el verdadero problema era la imagen antes los socios del club. Hoy esa imagen ha cambiado radicalmente y esperemos que se repitan tanto alineación como motivación el próximo domingo ante el ya descendido Sevilla Atlético, porque desde Lugoslavia nos atrevemos a afirmar que jugando así no habrá silbidos a los nuestros, independientemente del resultado, y es que parafraseando un cántico muy popular en el fondo norte del Anxo Carro: “hemos venido a emborracharnos divertirnos y el resultado nos da igual”.

Puntuaciones:

Juan Carlos: 7. Muy buen partido. Muy seguro en la primera parte ante los disparos de Osasuna, deteniendo y conservando el balón, sin dar segundas opciones y controlando las salidas a los balones en profundidad.

Lemos: 6. Aunque tuvo un partido relativamente tranquilo en su banda, estuvo atento y seguro. Algo más activo en ataque a partir del gol de Osasuna.

José Carlos: 6. Nos queda la duda de por qué ha tardado tanto en entrar en las convocatorias, porque estos dos partidos ha estado a un nivel excelente, aunque hoy ha tenido algún que otro despiste en el marcaje, especialmente en el balón parado del gol osasunista, lo que le baja la calificación.

Josete: 5. Tal vez no sea el central más dotado en cuanto a físico que ha pasado por Lugo, pero sabe suplirlo con oficio especialmente cuando tiene enfrente rivales duros, como hoy. Le baja la nota algún que otro despiste importante a la hora de tirar el fuera de juego.

Kravets: 6. Sigue pecando de precipitación, tanto en ataque con algunos centros excesivamente lejanos como en defensa (esa falta casi sobre la línea del área a punto estuvo de provocarme un infarto y que le costó una tarjeta amarilla).

Pita: 6. Con la presencia de Azeez y Gil por delante, Pita retrasó su posición hasta ejercer de medio centro muy defensivo (y casi tercer central) cuajando un buen encuentro, tanto defensivamente como en la salida de balón.

Seoane: 6. No pudo lucir como Pita por estar más pendiente de las tareas defensivas frenando a la mediapunta pamplonica, pero cuajó un buen partido en esa función.

Azeez: 6. Se entendió bien con Pita, Gil y Romero, distribuyendo bien el balón e incluso creando peligro con alguna caída a banda. En los últimos minutos, acusó el cansancio y es que era visto que el derroche físico de principio de temporada sería imposible de mantener hasta el final.

Sergio Gil: 8. La rabia con la que entró al remate en una de las primeras ocasiones de gol del Lugo fue el mejor ejemplo de lo que sería su partido. No sabría decir en qué puesto jugó (mediapunta, interior, medio centro, pivote,…) porque hizo un poco de todo: distribución, pases en profundidad, recuperaciones,… y casi todo bien. Especialmente resaltable cómo entró a la pelea por cada balón hasta el último minuto.

Jaime Romero: 7. Fue el que más peligro llevó, especialmente con sus conducciones por el centro. Le penaliza algo la nota ese exceso de individualismo que tiene a veces en los metros finales, pero completó un gran partido.

Escriche: 8. Como comentaba con el compañero de LGV Aarón durante el partido, ha hecho más desmarques en profundidad en el partido de hoy que Herrera, Chuli, Polaco y Barco juntos en lo que va de temporada. Ha estado bien en el desmarque, bajando el balón para los medios, combinando y entrando al remate. Vaya, lo que viene siendo el 9 que lleva reclamando el Lugo toda la temporada… sin ser un verdadero 9. Una muy buena noticia tener por fin alguien que crea peligro y se integra en el juego. Esperemos que no sean nada esas molestias que le obligaron a retirarse cojeando. Cansancio por el esfuerzo, probablemente.

Fede Vico: 4. Aunque aportó algo de peligro en ataque, la presión defensiva en el centro del campo bajó considerablemente con el doble cambio que les dio entrada a él y a Campillo. Tuvo en sus botas los 3 puntos, pero su remate a un centro medido de Kravets le salió demasiado centrado.

Campillo: 0. Sigue sin aportar nada relevante al equipo, como en los últimos encuentros. Una lástima en un jugador de su calidad.

Herrera: 6. Se le puede discutir la puntería, la forma de juego o cualquier otra cosa, pero el compromiso, del que tanto se ha hablado esta semana, no. Siempre que sale pelea y trata de cumplir, con más o menos fortuna. Esta vez tuvo la suerte de que el remate de Seoane acabase a sus pies y definió con calma, con lo que ya es el máximo goleador del equipo esta temporada.

Francisco: 8. Hay que reconocerle a Francisco que no se casa con nadie y es valiente a la hora de hacer la alineación por méritos y no por nombres, y digo valiente porque si Osasuna nos mete un segundo gol hoy (que pudo ocurrir perfectamente), la avalancha de críticas por la alineación habría sido de órdago. Acertó en la propuesta para frenar el peligro de Osasuna y tal vez haya recuperado de paso a un par de jugadores de cara al final de la temporada, algo que necesitábamos como el comer.

FICHA TÉCNICA:

CA Osasuna: Sergio Herrera; Lillo, Flaño (Kike Barja, min 80), Unai, Oier; Roberto Torres, Fran Mérida, Lucas Torró, Borja Lasso, Ibáñez (Quique, min 69); y Xisco (David Rodríguez, min 80).

CD Lugo: Juan Carlos; Lemos, Josete, José Carlos, Kravets; Seoane, Pita; Jaime (Vico, min 67), Sergio Gil, Azeez (Campillo, min 67); y Escriche (Herrera, min 74).

Marcador: 1-0, min. 55: Unai García / 1-1, min 76: Herrera.

Árbitro: Sagués Oscoz. Mostró amarillas a Kravets, Pita, Fran Mérida y Javi Flaño.

Incidencias: partido correspondiente a la 37ª jornada de la Liga 123. Disputado en el El Sadar.

 

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