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Vota CDL

por Denís Iglesias 15 diciembre, 2015
Tiempo de lectura: 5 minutos

¿Harto de eslóganes y programas vacíos? ¿Cansado de la actual campaña electoral? No te preocupes, la solución se encuentra a las orillas del Miño, donde se ha conformado una lista unitaria que impulsa el cambio desde la base. Sus colores son dos: el rojo y el blanco. No queda lugar para la confusión. Sus siglas: CDL, Club Deportivo Lugo. Lleva defendiendo la legitimidad del lucensismo desde 1953, fecha en la que se forjó un partido perenne, que ha sabido salir de las catacumbas gracias al apoyo desinteresado de sus más viejos militantes, que llevan el carnet entre los dientes en su día a día. Lleva en el recuerdo a aquellos que lucharon en el frente por la Gimnástica Lucense y a los que hoy forman parte de la vanguardia, antes mimbres: los del Polvorín.

El CDL es una formación compuesta por trabajadores, que cuenta en la actualidad con más de 5.000 simpatizantes. Todos abogan por la cercanía. Son los que invitan a una cerveza en la Taberna do Montxo o en A Calzada; los que te prestan el carnet cuando no les queda otra que ir a echar una mano a la aldea. O cuando toca trabajar porque el horario así lo indica. Han sabido ilusionarse con los goles de líderes como Pablo Caballero o con las paradas del que sin duda sería un grandísimo Ministro del Interior, José Juan, pacífico pero con capacidad para ordenar con mano de hierro a los militantes de base que le custodian.

Sabrás que el CDL, como todas las formaciones de su estilo, es incapaz de mantenerse en la política futbolística tan sólo con la aportaciones de sus militantes. Ojalá pudiera ser así, pero el Estado de la LFP impone unas reglas de juego que obligan a la asistencia de agentes externos, desde patrocinadores a directivos. Eres consciente de que recientemente se ha producido un cambio en la directiva. Esto ha desembocado en una lucha de corrientes internas entre los detractores y admiradores de los representantes de una y otra etapa. Por suerte, la mayoría, aunque silenciosa, sigue apoyando al CDL sin ambages y se queda con la actuación en las políticas de campo. Las células del partido han aumentado: desde Lugoslavia hasta As Ovellas, pasando por A Campiña, Peña Lucense de Madrid, Paixón Albivermella y muchas otras. 

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Contención de gasto

Algunos dirán que la nueva formación de futbolistas ha apostado por la austeridad en su juego, pero lo que ha hecho es aplicar una clara contención de gasto. Otrora el déficit de puntos que se vivía en la segunda parte de cada legislatura era flagrante y llegar a final de año requería calculadora. Por el momento, las medidas de ajuste están funcionando. Cierto es que del pan y circo se ha pasado a tener mucho más pan, pero sabe Dios que lo primero es comer y luego pagar por los malabares. 

El CDL admite haber pagado el pato de presentar en anteriores elecciones a caras bonitas y mediáticas como David Aganzo o Antonio Guayre. Dos de los muchos personajes que corrompieron el carácter trabajador y de clase media que siempre ha tenido este partido. La nueva dirección ha adoptado recientemente una medida sobre la que todavía no ha dado explicaciones, como es el despido de Jon García. La autocrítica ha de ser el motor fundamentales de un grupo humano que va mucho más allá de un grupo cuyo paso no deja de ser circunstancial, inscrito en la lógica del sistema.

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No al ‘voto útil’

A lo que sí se opone frontalmente este partido es al voto útil. Acoge sin miramientos a aquellos que durante años han optado por el bipartidismo, convertido ahora en tripartito, que lleva rigiendo los destinos del panorama futbolístico desde hace años. Todos cometemos errores. Incluso, si se percibe compromiso, está permitida la doble militancia. Para el CDL el voto provechoso es aquel que va parar a una plantilla en la que están jugadores que te puedes cruzar en la cola de supermercado, o con los que puedes compartir pupitre en la universidad. Hasta en la barra de un pub, porque son seres humanos, no robots programados para cumplir un dictado.

Los datos avalan las políticas del CDL. Es la octava potencia en los equipos del segundo mundo futbolístico. Viene de vencer al vecino SDP (Sociedad Deportiva Ponferradina) en una primera vuelta que ha superado con un amplio resultado. Su mensaje cala fuera y dentro de casa y sin grandes alardes se mantiene en la zona templada. 

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Un frente común del ‘lucensismo’

También ha mejorado la asistencia al local social, el Anxo Carro, que ha de ser uno de los centros de la vida lucense. Una plaza que esté llena hasta la bandera con cada mitin del equipo de Luis Milla, un líder a la vieja usanza, de los que exprimen la libreta y la pizarra. Los hay que se muestran díscolos con su estilo y agitan las redes sociales demandando un cambio en sus métodos. El debate, si se efectúa con argumentos constructivos, puede ser mil veces más enriquecedor que la espiral de silencio. El CDL, a pesar de admitir corrientes críticas, confía en la capacidad de un entrenador formado que nada tiene que envidiar al resto de los que trabajan en la categoría.

La formación rojiblanca es consciente de que en otras administraciones de la ciudad pujan partidos como el CBB (Club Baloncesto Breogán), PL (Prone Lugo), Ensino, Muralla, Emevé…. Pide igualmente el voto para todos ellos y trabaja por la formación de un frente común del lucensismo que podría liderar perfectamente. Una alianza de intereses que sepan ir más allá de la otra política, la de los políticos, la perversión aristotélica del arte de gobernar que los ciudadanos amurallados intentan olvidar con todas estas siglas, que conforman un punto de unión de una urbe que todavía ha de despertar.

Habrá sindicatos amarillos que intenten restarle crédito al CDL a base de silbatos. Otras formaciones intentarán asaltar el Anxo Carro e incluso los habrá que impongan reglas de juego para manejar de modo maniqueo los horarios. A veces la niebla apenas dejará ver la línea de cal y alguno deseará quemar a algún jugador para tener lumbre. Pero, con todo, uno sabrá que el poder disfrutar con todos los suyos es superior a cualquier adversidad. ¡Otro Lugo es posible, agita tu bandera y vota CDL ad infinitum!

Comité de propaganda de Lugoslavia

Fotos: Xabi Piñeiro-LGV.

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