Artículos

Eterno Capitán

por Xabier Piñeiro Neira 19 noviembre, 2015
Tiempo de lectura: 2 minutos

Un ejército de ciervos dirigido por un león es mucho más temible que un ejército de leones mandado por un ciervo” – Plutarco

Líder. Capitán.

Resulta curioso cómo se suele dejar de lado la importancia que tiene para el fútbol todo lo que ocurre más allá de los 90 minutos que dura un partido. Los factores que influyen en el resultado de un equipo a lo largo de una temporada son tantos y tan variados que analizarlos todos sería una cuestión puramente metafísica.

Entre los muchos debates que se abren en la mesa redonda albivermella en redes sociales y barras de bar, está el lateral izquierdo, esa república independiente en la que José Manuel Rodríguez Morgade “Manu” gobierna desde 2007 sin encontrar rival que ponga en duda su hegemonía.

Probablemente Manu no sea el mejor lateral izquierdo de Segunda División si nos limitamos a analizar aspectos técnicos y tácticos. Se critica que su capacidad de centrar balones es muy limitada, que pierde la posición, que le ganan la espalda.

Sin embargo sigue ahí. Pasan los entrenadores y Manu sigue ahí. Vienen fichajes para su puesto y Manu sigue ahí. ¿Por qué?

La importancia del “Eterno Capitán” va más allá del propio fútbol. Simplemente con fijarse un poco en el lenguaje subterráneo de cada partido, veremos por qué sigue siendo vital para el CD Lugo tener a un hombre así sobre el campo. Si un jugador sufre una mala racha y tiene el ánimo por los suelos, Manu le motiva. Si un jugador acaba de llegar a la plantilla, Manu hace todo lo que esté en su mano por integrarle y que se sienta uno más.

El último caso es el de Jonathan Pereira. El vigués había llegado como gran estrella pero su comienzo no fue todo lo bien que se podía esperar. Él lo sabía y se notaba en sus gestos, sus reacciones sobre el campo y Manu siempre estuvo cerca, haciendo su trabajo.

Hace unos días hablábamos con Miguel Escalona, uno de los héroes del Carranza, y nos decía que uno de los principales motivos por los que aquel Lugo ascendió fue que eran una gran familia, un grupo de amigos que iban todos a una. Y con toda seguridad, gran parte de aquel mérito fue de Manu.

Los habrá mejores, pero ninguno como él.

Eterno Capitán.

Imagen principal: Xabi Piñeiro, Lugoslavia.

Comparte:

3 Comments

Xabi Piñeiro 19 noviembre, 2015 at 14:16

Reblogueó esto en El Rey de la pista.

Reply

Deja un comentario