Buenas, querida familia rojiblanca. Os cuento, yo soy un chaval muy sentido, pero basta ya de hablar de mí. Hablemos de Ramón. Ramón Rivas Villares, ese hombre que reapareció después de meses de misterio. La verdad es que yo ya lo daba por perdido. No venía al fútbol, tampoco escribía nada en la web, sus intervenciones en el grupo de Whatsapp eran escasas, por no decir nulas y todas las conjeturas nos llevaban a lo mismo, estaba muerto o de parranda. Me alegró saber que está lozano y lustroso como siempre. Buen trabajo.
1 · Pero es que después de meses siendo compañeros de redacción/peña/todo/lo que sea, Piñeiro todavía le puso cara a Ramón el domingo. Esto es intolerable. Sabéis por qué pasan estas cosas, ¿verdad que sí? Porque la gente no viene a las cenas. Se avisa con putísimo tiempo de sobra para que estos energúmenos reserven hueco y el día antes que si es que tengo que ir a hacer una nosequé, que si es que no me da tiempo de nosécuanto, que si me surgió un quéseyo y claro, nos presentamos tres en el bar con cara de circunstancias. Con sed, eso sí. Tres, fuimos la última vez. Somos nueve.
2 · Igual que Papi y Chantres, otros no-muertos-pero-tampoco-vivos. La puta vieja guardia está esfumada. ¡Los fanes os quieren leer, hostia ya!
3 · Mal ambiente hubo el domingo en la grada y no lo que hay en el undecálogo, aunque parezca mentira. Resulta que tenemos un vecino de asiento que se dedicó una gran parte del partido a increpar e insultar. No estaría del todo mal si no fuera que contra los que cargó una y otra vez fue contra los nuestros. A Campillo especialmente lo puso de verano, cuando creo que fue uno de los que menos se merecía esos dulces deseos. ¡Qué creo, lo afirmo! Campillo hizo un señor partido.
4 · Su primera parte fue fabulosa, sin ninguna duda. Ejerció como el puto amo que es en la línea de tres cuartos. Defendió mucho y bien, se desfondó hasta acabar agotado, pero es que no acabó ahí su trabajo, ya que si en labores defensivas estuvo de diez, en labores ofensivas estuvo, por lo menos, ¡de once! Muchísima presencia al borde del área contraria y mucho peligro en sus botas. Comentar como punto menos positivo que los segundos cuarenta y cinco minutos se le hicieron un poquito largos.
5 · Y mira que insultarlo… Hay que saber bien poco de fútbol y bajar al campo porque no hay otra cosa mejor que hacer… En fin. ¡Mediopelistas al poder!
6 · Hablando de mediopelistas, hemos vuelto a ver a Molinero sobre el pasto del Anxo Carro mucho tiempo después, ¡y me alegra, mira tú como son las cosas! Me gusta saber que se cuenta con toda la gente -o, al menos, que se les da la oportunidad-. Es cierto que nada le vi, pero me contenta igualmente, ya rendirá más para la semana, el caso es ir entrando. Como Igor, que se está haciendo el habitual del minuto sesenta y ocho.
7 · Cosa que me recuerda que los cambios de Durán son insustanciosos de todo, me dicen poco.
8 · Pero no está así de mal delante de los micros el tío. ¡Pedazo rueda de prensa, eh! Lo comenté el propio domingo en un tuit y me reitero aquí ahora mismo, la rp fue tremenda. Durán muestra ilusión, ganas, seguridad… Parece que esos cinco minutos de declaraciones recarguen las pilas. Me gusta, además, que va de cara y dice las cosas como son no se dedicando apenas tiempo, por ejemplo, a lamerse las heridas ni a criticar al árbitro porque sí. Esto es lo que hay y punto. Y sí, joder, disfrutemos del momento.
9 · Pereira en esta foto parece Carmen de Mairena.
10 · Ahora a Tenerife. Los partidos contra los chicharreros me resultan apasionantes y complicados a partes iguales. Recuerdo gratamente los enfrentamientos con ellos de cuando estábamos en la B. Recuerdo especialmente uno que cayó a domingo por la mañana al que vinieran conmigo unos entonces compañeros de oficina barceloneses a ver un equipo de verdad. Ahí va la anécdota. Encontrándonos allí los tres, cerveza en mano, dice Javi totalmente extrañado, media caña después: “Oye Borja, ¿¿¿pero esta cerveza tiene alcohol???”. Respondí afirmativamente, pero como el hombre aún no las tenía todas consigo tuvo que preguntar a Ángel, el otro compi, para que corroborara mi afirmación. El éxtasis llegó cuando, en la segunda parte, nos dieron con cada consumición una tapaza de callos en vaso de plástico que pintaron en la cara de Javi una sonrisa de oreja a oreja. ¡Esto es Lugo!
11 · Quizás lleve trabajando como loco estos días y por eso esté fuera de onda, pero aún no sé el alcance de las lesiones de Pita y Palicaba. Les deseo una pronta recuperación y que les traigan muchas cosas los reyes.
Y hasta aquí puedo escribir, queridos. Tenía muchas más historias que contaros, pero las reglas son las reglas. Así que fanes, haters y gente que insulta a Campillo, se os saluda. ¡Hasta la semana que viene y Forza Lugo! (Periodismo no de bufanda).
PD: Por cierto, el resultado del partido contra el Tenerife de aquella temporada, empate.
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